Para realizar un abrillantamiento y pulido de suelos de máxima calidad, seguimos un proceso meticuloso que asegura resultados.
¿CÓMO TRABAJAMOS?
Evaluación inicial
Evaluamos el estado del suelo, identificando arañazos, manchas y desgastes. Seleccionamos el método de pulido y abrillantado adecuado según el tipo de suelo (mármol, terrazo, granito, etc.).
Preparación del suelo
Eliminamos cualquier suciedad superficial, polvo y escombros. Cubrimos muebles, paredes y otras superficies cercanas para evitar daños y mantener la limpieza.
Pulido inicial
Utilizamos discos de diamante de grano grueso para eliminar imperfecciones profundas, arañazos y nivelar la superficie. Retiramos los restos de pulido con una aspiradora industrial y limpiamos la superficie.
Pulido detallado
Aplicamos discos de diamante de grano medio para suavizar la superficie y preparar el suelo para el abrillantado. Inspeccionamos minuciosamente el suelo para asegurarnos de que todas las imperfecciones han sido eliminadas.
Pulido final
Utilizamos discos de diamante de grano fino o pulidoras específicas para obtener una superficie lisa y brillante. Aplicamos productos específicos para realzar el brillo natural del material y proteger la superficie.
Tratamientos
Aplicamos selladores o protectores antimanchas para prolongar la durabilidad del brillo y proteger el suelo contra futuras manchas y desgastes. En suelos donde sea necesario, aplicamos tratamientos para mejorar la seguridad.
PRESUPUESTOS
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